Aurelien Giraud, el skater imparable

Cambiando el paradigma del skateboarding

El skateboard está lleno de curiosidades, pero hay un tema en concreto que se convierte en una paradoja de lo más curiosa. Y es que aunque el skate consiste en pasarlo bien encima de un patín al margen de cánones y estereotipos, no puede estar más lleno de normas no escritas que parece que no se pueden romper si quieres sentirte acogido por la comunidad. Aún así, siempre hay skaters que cambian el paradigma del skateboarding, éste artículo se centra en uno de ellos: Aurelien Giraud, el skater imparable.

Una forma de concebir el skateboarding diferente

No hay duda de que en los últimos años la forma de concebir el skateboard está cambiando mucho. El skate siempre se ha considerado más un estilo de vida que una forma de deporte o entrenamiento. Los skaters siempre han formado parte de una comunidad pequeña y con denominadores comunes muy marcados.

Últimamente el skate ha crecido muchísimo, especialmente desde que grandes industrias como Nike o Adidas han empezado a reservar una parte de su presupuesto en marketing para el skate. Eso ha hecho que el skateboarding llegue prácticamente a todos los rincones del mundo y que muchos más jóvenes se decidan a empezar a patinar.

Personas con formas de ser, gustos y estilos de vestir totalmente diferentes se apuntan al carro del skate. Todo esto hace que no todo el mundo siga esas normas no escritas del skateboarding. Pero, ¿qué pasa si alguien que no se ajusta a los cánones del skate al 100% se convierte en uno de los skaters más influyentes del momento?

Como hacerse pro a través de Instagram

Ya ha ocurrido varias veces con otros skaters, personas con una gran personalidad y una forma de patinar muy especial que se convierten en iconos del skate hasta el punto de cambiar el rumbo de la tendencia. Lo hizo Tom Penny con su estilazo, lo hizo Dylan Rieder con su estilo y forma de vestir única.

Ahora es el turno de la generación de Instagram, y es que Instagram y las redes sociales en general han sido la herramienta que ha cambiado el rumbo de las cosas. En la década de los años 90 y especialmente antes de que Internet llegara a todas nuestras casas, el skate era un deporte muy minoritario y sin ningún tipo de presencia en los medios de comunicación.

Los vídeos de skate antes de que existieran las redes sociales

La única forma de estar enterado de lo que pasaba en la escena era a través de revistas especializadas o los vídeos en cinta VHS que sacaban las marcas de skate. Eso hizo que naciera el culto a las partes de vídeo de skate. La gente estaba atentamente esperando a que las marcas sacaran sus vídeos para ver las partes de cada uno de sus skaters; y los skaters y marcas se pasaban todo el año (o más) grabando clips para preparar su vídeo.

Eso, sumado a lo que cuesta conseguir sacar según que truco en según que spot hizo que los buenos clips de skate tuvieran mucho valor. Tanto es así que incluso habiendo entrado en la era de las redes sociales, los skaters y marcas han ido publicando vídeos y contenido de calidad. Pero siempre guardando lo mejor para su gran vídeo con las partes de cada uno de los skaters. Esa forma de producir contenido audiovisual es algo que va prácticamente implícito en el skate.

Además, la transición de amateur a pro en la carrera de un skater casi siempre se suele hacer a través de una parte de vídeo donde se plasma el nivel del skater y se justifica su nuevo estatus de pro.

Precisamente este es el cambio de paradigma que Aurelien Giraud (junto a otros skaters) está introduciendo de forma totalmente involuntaria y natural en la industria del skate. Usar una herramienta como Instagram, que al final es un escaparate, para enseñar su habilidad al mundo y demostrar su potencial como skater.

Explotando la marca personal como skater

El hecho de promover todo este contenido a través de su perfil personal, donde se lanza prácticamente un bombazo de truco diario hace que se pase de explotar la imagen de la marca para explotar mucho más la marca personal como skater.

Eso rompe totalmente los esquemas de como ha funcionado durante muchos años la forma de producir contenido en el mundo del skate en dos sentidos.

Antes la gente estaba muy atenta al contenido que se publicaba en marcas y medios del sector, ya que era los que comunicaban todo lo que se producía. Hoy en día además de todas esas marcas y medios entran en juego los propios skaters como comunicadores, y los skaters más relevantes son tan seguidos como cualquier otra marca o medio importante del sector.

Eso lleva implícito la explotación de la marca personal como skater. Evidentemente el skater sigue patinando para sus marcas y produciendo contenido para ellos, pero skaters como Aurelien Giraud no esperan a que ninguna marca o medio lance su mejor contenido. Él lo promueve a través de sus propias redes sociales, promocionándose a el mismo y dándose valor como skater.

Del purismo al entrenamiento

De forma inconsciente y sin tener demasiado en cuenta todo lo que rodea la escena. El skater de Plan B ha ido haciendo su patín, y su patín le gusta a mucha gente (cosa que no es de extrañar).

Un deportista en toda regla que invierte muchas horas en su patín y se lo toma como una forma de entrenamiento. Y como el resto de practicantes de otros deportes, lo graba y lo comparte en sus redes sociales.

Un chaval joven con su propio estilo de patín y un pop que deja a todo el mundo con la boca abierta. Sin querer y a base de publicar sus trucazos en sus redes sociales, está cambiando una vez más la forma de concebir el skateboarding de muchos.

Eso le convierte en Aurelien Giraud, el skater imparable.

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