En todoskate.com siempre nos mantenemos al margen de opiniones políticas y/o religiosas, pensamos que son creencias muy profundas y personales que en cada caso son particulares y que no deberían mezclarse con el skateboarding. Algo distinto nos ocurre con temas más humanos y/o sociales, no podemos evitar posicionarnos a favor de la igualdad y la justicia. Hoy hablamos de Marbie Princess, la primera pro skater transexual de la historia y del colectivo LGBT dentro de la comunidad skater.
Los estereotipos en el skateboarding
Es algo que ya hemos comentado varias veces, y aunque odiamos reconocerlo y debería ser totalmente lo contrario. El skateboarding está lleno de estereotipos y etiquetas.
Poco a poco va cambiando con el esfuerzo de todos, pero hasta hace bien poco el perfil de skater era el de un chico joven, blanco, con cierto poder adquisitivo y generalmente residente en America del Norte o Europa.
Durante mucho tiempo mujeres, gente de color y gente con tendencias sexuales distintas eran relativamente excluidas dentro de la industria. Eso no significa que los skaters sean xenófobos o cerrados de mente, pero sí significa que la industria que hay detrás de todos esos skaters no realiza el trabajo correcto. Generalmente, se centra en explotar ciertos tipos de imagen y conductas que al final se acaban asociando al skateboarding.
Lo cierto es que no fue hasta bien entrada la década de 2010 en la que se empezaron a ver ciertos sectores del skateboarding descontentos con esa realidad, y con la necesidad de experimentar un cambio.
Además hay que recalcar que ese cambio no vino de la industria, sino de los propios skaters y personas. Movimientos como el feminismo y la valentía de algunos skaters que han luchado por la igualdad, han aportado mucho a todo este cambio.
Brian Anderson, de los primeros pro skaters en salir del armario
Brian Anderson fue de los primeros pro skaters en salir del armario y anunciar a todo el mundo su homosexualidad con orgullo. El dato curioso de la historia es que el mundo tuvo que esperar hasta el año 2016 para ver a un skater declarar su homosexualidad.
Quizás no fue el primero, pero si fue el primero en hacer llegar ese mensaje a millones de personas. Brian dejó claro a la industria que la condición sexual no te define como patinador ni como profesional.
Esa declaración por parte del skater Brian Anderson, marcó un antes y un después dentro de la industria. Además, hizo latente la gran diferencia entre declararse gay antes de ser pro skater o después de ser pro skater.
Básicamente un chaval con aptitudes pero declarado homosexual difícilmente podía llegar a ser profesional del skate. Pero ante un profesional como la copa de un pino que de repente se declara homosexual poco se puede hacer.
Marbie Princess, pro skater de There Skateboards
Parece ser que ha llegado el momento de dar un paso más. Recientemente la marca de skate There Skateboards ha hecho pro skater a Marbie Miller.
La skater de Madison (Wisconsin) ha sido presentada con un video que ha compartido Thrasher Magazine, una de las revistas de skate más relevantes de la historia.
Con 26 años ha conseguido su estatus de pro. Además, se ha convertido en una de las skaters que lleva la igualdad de genero com estandarte.
El skateboarding no conoce de barreras ni límites, su máximo representante siempre ha sido la libertad de expresión y la ausencia de normas. No hay duda de que personas como Marbie siguen remando en esa dirección.
Bienvenidos al S XXI
El skate tiene esas dos facetas, por un lado está la calle y por otra está la industria.
El hecho de que el skate sea concebido como un estilo de vida está muy bien. Eso lo convierte en una de esas comunidades amables, generosas y donde mucha gente hace cosas por el simple amor al arte.
Pero también hace que mucha gente lo conciba únicamente como un estilo de vida, olvidando la industria, que nos guste o no está allí y es el motor económico que hace que todo se sustente.
Está claro que al margen de que la industria y las herramientas de marketing y publicidad pretendan manejar la situación, el pueblo es quien decide y en este caso el pueblo son los skaters.
La inclusión social, la igualdad o la libertad de expresión, son muy importantes. Por eso, tanto industria como skaters deben remar en la misma dirección. Hagamos honor al estilo de vida que todos vivimos y del que todos vivimos, ¡LARGA VIDA AL SKATEBOARDING!